sábado, 12 de octubre de 2013
Paciencia VIII
Una araña hilvana su tela con sumo mimo y cuidado, con seda más resistente que el acero y más elástica que cualquier fibra sintética. Después se retira, a esperar a que caiga atrapada en ella una presa, una gota de rocío o una tormenta de verano. Quizá pueda comer. Tal vez no. O puede ser que tenga que volver a empezar. ¿La naturaleza es paciente? ¿O la evolución no tiene prisa...?
lunes, 7 de octubre de 2013
miércoles, 18 de septiembre de 2013
Paciencia estival
Una vez fui a pescar, cuando era niña. Lo recuerdo con absoluta claridad. Pesqué un pez muerto. Qué paradoja. Qué tristeza. Lo devolví al agua. Un rato después pesqué una bota: vieja, roída, asquerosa. La eché también de vuelta al mar. No he vuelto a pescar. La paciencia de los pescadores es infinita...
jueves, 22 de agosto de 2013
domingo, 7 de julio de 2013
Paciencia creciente
Pasear por un bosque en invierno, perderme entre los esqueletos desnudos de los árboles hibernando, me obliga a volver a lo esencial, a obviar lo superfluo y buscar la columna troncal mi existencia. Este enorme y centenario fresno tenía el tronco tan hueco, tan vacío, que se había partido en dos. De la mitad que permaneció en pie, salían nuevas ramas, verdes y flexibles buscando el sol. ¿Una oportunidad? ¿Un cambio de rumbo? ¿Un deshacerse de lo que sobra para volver a brotar?
Suscribirse a:
Entradas (Atom)